Quise ir por la vía fácil y utilizar un personaje recurrente en mis historias de Aerandir: Adie, cibernético mensajero y muchas otras funciones. Cambié un poco la historia y el nombre para adaptarlo al reto: Adie, robot escritor y muchas otras funciones. Gustó mucho al público y, esta mal que yo lo diga, no es para menos. Tengo mucho aprecio a este personaje.
Día 17. La palabra era inflorescencia
Una palabra muy complicada. No se me ocurría nada decente. Tomé el camino fácil. No estoy orgulloso de este relato. Pienso que de haberle dado otra vuelta a la idea, hubiera hecho algo mucho mejor.
Día 18. La palabra era oscuridad
Este relato me resultó especialmente difícil y es que la palabra "oscuridad" me resultaba demasiado ambigua, la podría utilizar en casi cualquier ámbito. Me quedé frente a la pantalla del ordenador pensando una buena historia que contar; encontré centenares. Me decanté por contar la historia que me estaba sucediendo en eso momento.
Día 19. La palabra era escopeta
Soy consciente que mi humor es muy ácido y que, según la persona, puede resultar de mal gusto. Al ver la palabra "escopeta" me vino a la mente la nota de suicido del cantante Kurt Cobain, del grupo Nirvana. Este relato lo creé a modo de homenaje. Recogí varias frases de sus canciones y algunas de su nota de suicido. No estoy disgustado por el relato, realmente me gustó escribirlo, pero considero que según quien lo lea puede resultar de mal gusto.
Día 20. La palabra era puerta
Este relato me gustó muchísimo. Se me hacía tarde para participar. No encontraba nada que me gustase con puerta. Llegué a casa tarde, me puse a hacer las tareas domésticas y... de repente..., ¡zas! Lo vi muy claro. Hay veces que las ideas surgen de repente, en la vida cotidiana. No es necesario quedarse mirando la pantalla negra del ordenador, como vimos en el relato del día 18.
Relatos de los día anteriores:
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